Llovia torrencialmente en Buenos Aires cuando anoche debutaba “Un dios salvaje” en la calle Corrientes. Por eso todos los famosos recurrieron a paraguas, pilotos y lo que tenían a mano para cubrirse del agua que caía a baldes, cuando debían cruzar la galería del Complejo La Plaza, hasta subir a la sala del primer piso.
Entre otros, Nacho Gadano, grabando en Pol-ka como el villano de “Alguien que me quiera”, llegó con su mujer Andrea Bonelli, luciendo un improvisado pilotín amarillo. Oscar Martínez consiguió paraguas y pudo cubrir a su mujer, Marina Borensztein. Y Laura Novoa y Mario Segade se refugiaron bajo un delicioso paraguas celeste con nubes.
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