El actor Al Pacino, al que algunos califican como una leyenda viva de la interpretación, confesó que a los 20 años se prostituyó para poder sobrevivir.
Concretamente en Sicilia, y fue alojado por “una mujer mayor” en su casa, a la vez que le satisfacía sus necesidades alimentarias. Él, a cambio, le ofrecía sus favores sexuales.
El protagonista de El Padrino, comentó que en sus difíciles orígenes en el mundo de la interpretación, no le quedó más remedio que prostituirse para salir adelante. Mientras seguía probando suerte en el teatro y en el cine.
En los años sesenta, y tras dejar los estudios, no tenía trabajo para pode mantenerse. Y sólo pensaba en cumplir su sueño dorado de dedicarse a la interpretación. Pero como de sueños no se vive, “pasó lo que pasó”.
Al Pacino comenta que lo peor era por las mañanas. Cuando “se odiaba por hacer eso”. Pero también comenta que no le quedaba más remedio. Nada más comentó del tema. Así como la identidad de aquella mujer.
Las actuales estrellas de Hollywood tienen que realizar, en ocasiones, las tareas más penosas en su carrera a la cima. Algo así como un “vía crucis” personal. Desde camarero, hasta repartidor ambulante. Ahora Al Pacino abre la brecha con una nueva vuelta de tuerca.
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